El pontífice saludó con afecto al país entre vítores de los asistentes: “¡Costa Rica, viva Costa Rica!”
Ciudad del Vaticano. En un gesto que conmovió a muchos costarricenses, el papa León XIV mencionó a Costa Rica durante su primera audiencia pública como Sumo Pontífice, celebrada este miércoles en el Aula Pablo VI del Vaticano.
Al concluir un breve mensaje dirigido a representantes de la prensa internacional que cubrieron el reciente cónclave, un grupo de asistentes comenzó a llamarlo con entusiasmo: “¡Costa Rica! ¡Costa Rica, papa!”
El papa, con una sonrisa visible, se acercó al grupo y respondió con calidez: “¡Costa Rica, viva Costa Rica!”, lo que generó emoción y aplausos entre los presentes.
Momento captado en video
El momento fue registrado en video y compartido por la página de Radio Fides en Facebook, donde rápidamente se volvió viral entre fieles y medios nacionales. El gesto ha sido interpretado como una muestra de apertura y cercanía, rasgos que han marcado los primeros días del pontificado de León XIV.
Un pontificado que apuesta por la sensibilidad y el diálogo
Desde su elección, León XIV ha dado señales de querer construir un liderazgo pastoral cercano, inclusivo y atento a las realidades globales. Durante una reunión reciente con el Colegio de Cardenales, explicó que eligió su nombre en honor a León XIII (1878-1903), recordado por su compromiso con la justicia social y los derechos laborales.
Este saludo espontáneo a Costa Rica se suma a otros gestos simbólicos con los que el papa ha comenzado a delinear un estilo expresivo, empático y dialogante, en contraste con los tonos más reservados de sus predecesores inmediatos.
Un nuevo capítulo en el Vaticano
El inicio del pontificado de León XIV ha estado marcado por mensajes de modernización, reflexión teológica frente a los avances tecnológicos, y llamados a reforzar el papel de la Iglesia ante los desafíos del siglo XXI.
Con menciones afectuosas como la dirigida a Costa Rica, el papa parece decidido a acercarse a las comunidades católicas del mundo con un lenguaje más directo y humano, fortaleciendo el vínculo entre el Vaticano y los pueblos.
“¡Costa Rica, viva Costa Rica!”: un saludo que resuena más allá del Aula Pablo VI y que ya queda registrado como una de las primeras muestras del estilo cercano de León XIV.