La tarde del viernes finalizó con una trágica noticia en Playa Esterillos, donde la Cruz Roja Costarricense encontró el cuerpo sin vida de un joven que había sido reportado como desaparecido días atrás, tras ser arrastrado por una fuerte corriente mientras disfrutaba del mar junto a otras personas.

Según las autoridades, el joven fue la única víctima fatal del incidente, ya que sus acompañantes lograron salir del agua por sus propios medios. La emergencia generó una intensa operación de búsqueda terrestre y marítima, la cual culminó con el hallazgo del cuerpo tras varias horas de labores continuas.

Playa sin vigilancia permanente

El accidente ocurrió en una zona sin presencia fija de guardavidas, una situación que preocupa a los cuerpos de socorro, especialmente durante épocas de alta visitación como las vacaciones escolares.

“El desconocimiento de las corrientes, el exceso de confianza o ingresar al mar bajo efectos del alcohol son las principales causas de estos accidentes”, advierten socorristas.

Coordinación interinstitucional

Una vez ubicado el cuerpo, socorristas de la Cruz Roja aseguraron el perímetro y coordinaron con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) para el levantamiento y posterior traslado del cuerpo a la morgue judicial. La identidad del joven no ha sido revelada oficialmente, ya que se está a la espera de notificar a sus familiares.

Esta operación resalta la importancia de la coordinación interinstitucional, especialmente en zonas alejadas o de difícil acceso, donde la respuesta rápida y articulada puede ser determinante.

Vacaciones marcadas por emergencias

Durante el receso escolar de medio año, la Cruz Roja Costarricense ha atendido al menos 56 incidentes similares en diversas playas del país, lo que pone en evidencia la urgencia de reforzar los sistemas de prevención y vigilancia en zonas turísticas de alto riesgo.

Desde NTG Costa Rica, nos solidarizamos con la familia del joven fallecido y reiteramos el llamado de las autoridades a respetar las recomendaciones de seguridad en playas, evitar ingresar al mar en condiciones peligrosas y exigir presencia de guardavidas en destinos de alta afluencia.