La comunidad de San Juan de Dios amaneció este domingo con una tragedia que ha conmocionado al país: un voraz incendio cobró la vida de Marilyn Chacón Mora, de 33 años, y sus tres hijos menores de edad: Kendall, Keylor y Kristell.
Según el testimonio de Graciela, vecina del lugar, la familia tenía apenas siete meses de habitar el inmueble donde ocurrió el siniestro.
“Yo sé que ellos alquilaban al frente y se pasaron ahí hace como siete meses. Siempre la veíamos pasar para la escuela con los chiquitos”, relató conmovida.
La vecina también narró los angustiosos momentos en que las llamas se apoderaban de la vivienda:
“Cuando salimos, era el montón de llamas… se escuchaban gritos de niños y la muchacha pidiendo ayuda. ‘Auxilio, auxilio’, decía, pero era demasiado el fuego. Demasiadas las llamas”.
El incendio
La emergencia fue reportada a las 5:48 a. m. y movilizó unidades del Cuerpo de Bomberos de Desamparados y Metropolitana Sur, quienes al llegar encontraron el segundo y tercer piso del edificio completamente envueltos en llamas.
El inmueble, según datos preliminares, funcionaba como una cuartería, aunque el primer piso era utilizado como establecimiento comercial. En los niveles superiores se encontraban las residencias.
Dos hombres lograron ser rescatados de la parte trasera de la estructura, pero las víctimas no pudieron escapar, presuntamente debido a que el fuego bloqueó la única ruta de salida.
Los niños fallecidos eran hijos del oficial de la Fuerza Pública Andrés Guillén Infante, quien no se encontraba en la vivienda al momento del siniestro, ya que estaba en su día libre.
Investigación en curso
Las autoridades aún investigan las causas exactas del incendio. No se ha confirmado cuántas personas vivían en el lugar, pero el caso ha puesto nuevamente en evidencia los riesgos que representan las cuarterías, especialmente aquellas que no cuentan con salidas de emergencia ni condiciones estructurales adecuadas para uso residencial.